Si estás entre esas personas que quieren perder peso rápidamente, saltar la cuerda es una de las mejores maneras de hacerlo. En este artículo te contaremos todo lo que necesita saber para sacar el máximo provecho de esta actividad.
Saltar la cuerda es un excelente ejercicio cardiovascular y una de las mejores maneras de ponerse en forma. Por esta razón, te diremos todo lo que necesitas saber sobre el tema y te daremos consejos sobre cómo sacar el máximo provecho de tus entrenamientos.
Seguramente es una actividad que has hecho de niño con tus compañeros de clase y es muy probable que no hayas saltado la cuerda en mucho tiempo. Sin embargo, la simplicidad de este ejercicio, así como su efectividad y beneficios, animan a muchos atletas a practicar esta divertida actividad.
El salto con cuerda es definitivamente uno de los ejercicios cardiovasculares más efectivos para perder peso y entrenar más grupos musculares. El movimiento que se realiza requiere el uso de los brazos (especialmente los hombros), involucra la espalda e incluso los abdominales.
Una de las ventajas es que puedes elegir la intensidad con la que quieres hacer esta actividad, ya sea para calentar, quemar calorías o aumentar la fuerza.
Además, no necesitas ningún equipo, sólo un par de zapatillas y una cuerda. No encontrarás ninguna excusa para no entrenar, el lugar o las condiciones meteorológicas no pueden detenerte, ya que puedes practicar cómodamente en tu salón.
Un fantástico ejercicio cardiovascular
Saltar la cuerda es una herramienta perfecta para quemar el exceso de grasa y mejorar su condición física. A diferencia de otros tipos de ejercicios cardiovasculares, la mayoría de las personas que realizan esta actividad no sufren daño muscular y no tienen problemas con sus articulaciones o huesos.
La clave de este ejercicio es ejecutarlo correctamente. Por ejemplo, la mayoría de los principiantes generalmente saltan más alto de lo necesario, lo que aumenta el riesgo de lesiones.
Varios estudios han demostrado que es uno de los ejercicios cardiovasculares más efectivos disponibles. Puedes recuperar la forma deseada con unos pocos minutos de ejercicio al día. Dependiendo del estilo utilizado para saltar la cuerda, puedes entrenar casi cualquier área del cuerpo.
Gracias a su eficacia y versatilidad, los boxeadores llevan años poniendo en práctica los saltos con cuerda. Entre las muchas ventajas que podemos enumerar se encuentran el aumento de la capacidad cardiovascular, la mejora de la flexibilidad, la mejora del ritmo y el aumento del tono muscular en los hombros, brazos y piernas.
Cómo empezar a saltar la cuerda
Como hemos dicho varias veces es un ejercicio efectivo y completo que involucra múltiples grupos musculares. Los músculos de las piernas sirven para saltar, los abdominales para mantener el equilibrio y los músculos de los brazos para girar la cuerda.
Si se realiza correctamente, es una actividad con menos impacto que correr y menos posibilidades de causar lesiones musculares. La mejor manera de empezar es tener una cuerda que esté en buenas condiciones y que sea ligera y rápida.
Ahora, sólo tienes que hacer el ejercicio tan fácilmente como sea posible. No intentes saltar tan rápido como puedas o hacer ejercicios complicados de inmediato, sólo estarás expuesto al riesgo de lastimarte.
Aumento progresivo de la dificultad
Al principio es preferible empezar saltando con los dos pies a la vez. Después puedes alternar los pies o saltar con un solo pie.
Debes sentirte libre de experimentar, siempre prestando atención a tus movimientos. Trate de aterrizar suavemente sobre los dedos de los pies y evite saltar demasiado alto.
No olvide que la intensidad de la rotación de las cuerdas es un factor importante para quemar grasa y aumentar el metabolismo, tanto durante como después del entrenamiento.
Saltar la cuerda es una gran manera de quemar calorías y no requiere habilidades especiales, lugares específicos o grandes gastos en equipo. Esta es una actividad estimulante que también se puede practicar en casa.
Sólo debes prestar atención a los zapatos que usas y a la superficie sobre la que saltas (resbaladiza, mojada, etc.). Recuerde calentar y estirar bien.
Independientemente de su condición física inicial, este es un ejercicio que lo estimulará a probar nuevos desafíos. Con un poco de práctica y perseverancia podrás hacer los ejercicios más difíciles y complejos. ¿Qué estás esperando?