Perder peso no es tarea fácil, y aunque muchas veces nos dedicamos en cuerpo y alma a perder peso, aun así se puede dar el caso de que no logres tu objetivo. Entonces ¿que está pasando?, ¿por qué no adelgazo?. A continuación te enumeramos 7 errores comunes que sabotea tú programa de pérdida de peso.
¿Por qué no adelgazo? 6 errores comunes:
1- Un objetivo poco realista de pérdida de peso:
Establecer una meta demasiado exigente para perder peso, como por ejemplo el peso que tenías antes de tener tu primer hijo, hace ya bastantes años, o empeñarte en tener una determinada talla de pantalón, no es la mejor manera de establecer tu objetivo de pérdida de peso. Procura establecer un objetivo realista y fácilmente alcanzable. Una vez conseguido ya tendrás tiempo de volver a establecer nuevos objetivos. Poco a poco puedes conseguir lo que te propongas.
2- Comer más de lo que se cree
Muchas veces se están consumiendo más cañrias de las que pensamos. Para ello es muy útil calcular tus necesidades clóricas y seguir una dieta hipocalorica adecuada para ellas
3- Saltarse comidas
No debes saltarte ninguna comida. Aunque hay una creencia popular de que esto te ayudará a perder peso más deprisa, la realidad es muy diferente. La sensación de hambre y el mal humor pueden provocar que comas en exceso en la siguiente comida. Generalmente la ansiedad provocada por el hambre aumenta las posibilidades de pegarte un atracón de comida poco saludable y llena de calorías como las patatas fritas.
4- No hacer ejercicio
La dieta aunque es fundamental, es solo una parte de lo que debes hacer para perder peso de forma saludable. El ejercicio, en especial los ejercicios con pesas son la combinación ideal de una buena dieta. Aumentan el consumo calórico y te ayuda a ganar masa muscular. Ten en cuenta que la masa muscular consume más calorías que el tejido graso, por lo que tu tasa metabólica basal aumentará, algo fundamental para perder peso.
5- O todo o nada:
Incluso la gente más disciplinada y con fuerza de voluntad flaquean de vez en cuando. La clave está en cuanto tardas en volver al camino correcto. Lo cierto es que comentarios como “total ya he roto la dieta, voy a esperar al lunes para continuar otra vez” se escuchan muy a menudo y lo cierto es que no tiene sentido. Que en un momento dado en una comida te excedas, no es motivo para no hacerlo bien en la siguiente comida.
6- Comer demasiado deprisa:
- Comer despacio y masticar bien, hará que te sientas saciada/o de forma más rápida. El acto de masticar envía mensajes químicos al cerebro avisándole de que ya se ha saciado.
- Para que la señal de saciedad llegue al cerebro, se debe dar tiempo suficiente para que inicie la digestión y se generen ciertas hormonas que provocan la señal de saciedad.
- Además, masticando bien cada bocado se mejora la absorción de nutrientes.
- Intenta masticar cada bocado por lo menos 12.
7- No planear las comidas
Imagínate lo siguiente, son las 20:00 y no sabes que cenar, realmente pedir una pizza es muy fácil y también la mejor manera de tirar por tierra el esfuerzo de varios días. Pero si tienes tus comidas cuidadosamente planificadas el riego de que este tipo de tentaciones aparezcan es mucho menor. Intenta no sabotearte y no ponerte a ti misma/o en aprietos.
Si cambias tus hábitos y evitas estos errores, probablemente no tengas que volver a preguntarte,¿por qué no puedes adelgazar nunca más.